miércoles, 11 de octubre de 2017

NI FLORES, NI CHOCOLATES. DÍA DE LA MUJER BOLIVIANA

Hoy les envió a todas la mujeres de este grupo un abrazo y un saludo, ¿pero mis felicitaciones? No sé, creo mejor mandar MIS RECONOCIMIENTOS a la mujer esforzada, se recuerda el día de la mujer boliviana, en homenaje al nacimiento de la escritora Adela Zamudio. Que al enterarme más de la historia, su historia y de aquellas que escribieron la gran historia boliviana, de Bartoliza Sisa, Juana Azurduy de Padilla, de las Heroínas de la coronilla; de muchas otras más que no recuerdo. Me hace pensar que lo correcto no es felicitarles como si fuera un cumpleaños, como para regalarles flores, peluches o chocolates; sino reconocerlas por ser ellas mismas, por su lucha constante de ser reconocidas, por su esfuerzo de conseguir lo que se propongan en base a su esfuerzo y dedicación.
Una amiga a quien conocí hace unos años, de los pocos días bastaron esas pocas horas para apreciarla en demasía, Luz Vardy Ulloa, psicóloga (mi amiga cambita) escribió por el grupo Whats'App: "Mis respetos a las féminas que seguimos lidiando con un sistema cargado de desigualdad,  de estereotipos y misoginia...aún así estamos al frente de nuestros hogares   con o sin "él". Falta mucho para que nuestros derechos sean plenamente ejercidos...pero cada día,  cuando vas a trabajar (dejando a tus hijos y quizás tus sueños)en micro, a pie o en auto...para llevar comida a tu prole sin que te importe lo que te diga tu suegr@, tu vecin@ o quien sea...es un pasito que damos  a esa anhelada igualdad de derecho cómo Dios manda!!!... Aclaro...no felicito por "ser mujer", refuerza mi pensamiento de que hoy no regalo flores, peluches o chocolates.
Es complicado ser mujer, y no lo digo como varón que siempre ronda en las cavilaciones tratar de entenderlas, que casi siempre llegamos a pensar que son complicadas de entender u otras cosas que se hablan en los espacios donde los varones nos reunimos para hablar de ustedes, y que por lo general terminan en discursos rondando la misoginia. Lo digo porque desde pequeñas, ustesdes luchan contra un mundo desigual. Son las que más hacen en la casa, las que más son propensas a ser víctimas de violencia (en especial la sexual), la que para trabajar, conseguir trabajo o puestos jerárquicos en los espacios laborales, políticos y gremiales encuentran más limitantes y todo por vivir en un mundo (no sé) patriarcalista, machista  o quizás mercantilistas consumista; o como dice Luz Vardy "un sistema cargado de desigualdad".
Hoy la mujer esta cosificada es mercancía de venta (¿a cuanto?), es trofeo de promoción, es motivo de lucro (para otr@s menos para ella), es materia prima, es mano barata, es objeto sexual, lujuria de la perversión de "un sistema cargada d desigualdad".
Mil perdones en este grupo he aprendido mucho de ustedes, así como en otros grupos de los que soy parte, pero... a las Mujeres no las felicito, no les regalo flores ni chocolates (aunque los chocolates son ricos, me encantan), hoy es otro día más dentro de los 365 días del año, espacio perfecto para respetarlas, valorarlas, de reconocerlas en su verdadera dimensión luchadoras, esforzadas; victoriosas. Lo sé porque lo encuentro todos los días en mi esposa, en mi madre, mi hermana y mi cuñada, pero además lo veo en quienes en su amistad brindada aprendo de ellas constantemente. Me enseñan cada que la construcción de la FELICIDAD se escribe con "S" (FELISIDAD), CON "S" de Sacrificio, de Sudor, que con esfuerzo se hace a la construcción de felicidad y que la misma se vive en los procesos en esos detalles de cada día ustedes la viven cuando saludan, cuando interactuan, cuando miran... esas cosas que nosotros, los varones no vemos: ¿estás bien?, ¿te fijaste como esta?, ¿me emocione al ver a mi hij@ renunciar a ver tv, por hacer sus deberes... sin que le dijera nada?, llore cuando mi hij@ corrió a darme un abrazo para decirme que me ama, ¡¡¡Voz, llegas del trabajo, nuestr@ hij@ corre para decirte que te ama y... nada!!! y no en los objetivos como lo vemos los varones, que entendemos la felicidad cuando tengamos casa, cuando tengamos auto, cuando tengamos un buen estatus..., cuando tengamos plata. Nos perdemos y lamentablemente estamos enseñando a perder la verdadera esencia de la vida y las estamos obligando a ver desde nuestra perspectiva; desequilibrando la balanza de ser complemento hombre y mujeres destinados a ser felices. Con razón este sistema esta cargado de desigualdad.