lunes, 29 de junio de 2020

DISTANCIAMIENTO SOCIAL; LAS CONSECUENCIAS DE UN ERROR CONCEPTUAL

Según el diccionario de la RAE (Real Academia Española) cuando se circunscribe a la definición de "Distancia"(1) señala tres indicadores que sin duda se las debe poner en contexto de análisis en estos tiempos de COIVD-19.
Esta definición hace referencia, en primer lugar a un espacio o intervalo de lugar  que media  entre dos cosas o sucesos. Otra definición es la que hace hincapié a la diferencia, la semejanza notable entre unas cosas y otras. Por último indica que la distancia es el alejamiento, el desvío, desafecto entre personas; ésta definición y particularmente esta última implica realizar un breve recorrido por el escabroso mundo del análisis; me refiero a lo escabroso por las distintas perspectivas que puedan desarrollarse.
Pero antes debemos asumir y tomar en cuenta otro aspecto a tomar en cuenta y es el factor social que debe ser entendida como grupo de referencia, de familia, de roles y estatus, para entender esta dimensión es necesario identificar que se genera desde la interacción para el logro de las metas individuales y colectivas; en otras palabras en entender que de alguna manera las personas influyen en la actitud, el comportamiento, en las creencias, los sentimientos y otros aspectos que hacen a la dinámica del ser humano en su interacción. 

Por tanto la cultura se basa en esa interacción social, en su capacidad de influir, de interactuar... de ser. El hecho de no generar una interacción social conlleva a la cercanía de un riesgo potencial para la existencia misma del ser humano(2). Obviamente este aspecto de riesgo social, se desarrolla en el imaginario colectivo desde lo económico, entender que la sociedad esta en riesgo por la falta de acceso a la educación, los problemas familiares, la contaminación ambiental y; en nuestro tiempo es hacer referencia a la presencia del CORONAVIRUS. Aspecto que, circunstancial o nó, genera un riesgo social. 


Surge entonces un aspecto fundamental, ahora que hacemos referencia a los errores de concepción cuando se hace referencia a la DISTANCIA SOCIAL trabajado y promocionado por diversas entidades, el mismo gobierno la promulga; Pero sin entender las consecuencias y las secuelas de ese término, por cierto mal entendido, mal aplicado.
En una publicación de la revista salud y enfermedades expresan una opinión de la sociologa Jennie Brand quien propone a la OMS un cambio de termino "distanciamiento social" y manifiesta que: "usualmente expresa algún tipo de individualismo, la desconexión social y a menudo la exclusión", definitivamente tiene mucha razón. 
Las razones del uso del termino de "distanciamiento social" no hará más que profundizar la diferencial sociales e indefectiblemente  conlleva a un riesgo social de humanización negativa o como se la conoce en el colectivo social "Deshumanización" aspecto que no mide las serias secuelas que viene dejando en tiempos de COVID-19. Es reentender que un simple término nos lleva a alejarnos de la sensibilidad humana, es quitar de la orientación o inclinación que tiene la humanidad hacia la producción de relaciones de amor, de amor a la vida (biofilia) y que consistiría en rasgos positivos de nuestra existencia.
Somos seres sociales y como tal hacemos honor a la misma desde la conexión, desde la interacción sea con familiares, amigos; por tanto resulta incoherente hacer referencia al distanciamiento social. No podemos alejarnos de o que le es inherente, a menos que entre las truculentas acciones de quienes detenten el poder busquen precisamente eso, deshumanizarnos. Un solo correo electrónico, un mensaje de texto por el celular, una vídeo llamada no hace estarnos cercanos, cercanos en nuestras historias, cercanos en nuestras emociones, sentirnos queridos..., menos solos; afrontamos de mejor manera estos tiempos de COVID-19.
Entones implica hablar de DISTANCIAMIENTO FÍSICO profundizando lo que realmente es importante el ACERCAMIENTO SOCIAL DESDE ESAS DISTANCIAS FÍSICAS, "Solo porque tenemos que mantenernos a distancia on significa que debemos estar solos", manifestó la Dra. Altha Stewart, expresidenta de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría durante una teleasamblea (3). Somos seres sociales de debemos mantener la comunicación y el acercamiento afectivo desde las distancias, que aunque menguadas por un aparato electrónico es mejor a no tenerla, ayuda a fortalecernos en tiempos de crisis, a aliviar los sentimientos de soledad, quizás el mismo aislamiento... incluso ayuda a ver la crisis desde una perspectiva de resiliencia (de fortaleza ante la adversidad). Esta demostrado que los vínculos afectivos, el sentido del humor, las conexiones sociales, entre otras activa y reactiva el sistema inmunológico y por ende a combatir enfermedades reduciendo el estrés y mejorando la calidad de vida. Cambiemos de perspectiva, que no estamos en tiempos de negar nuestra inherente realidad, que no es saludable ser indiferentes, acerquémonos desde las distancias físicas a los corazones sedientos de acercamiento social.